Ángela Merkel: el fin de una era

 

Fuente: El independiente

Dentro de unos días, el próximo 26 de septiembre, en Alemania se realizaran unas nuevas elecciones que traerán consigo un cambio de gobierno. Esta nueva configuración del poder dentro de la tierra de los germanos, en líneas generales no debería causar preocupación. Salvo por una cosa: esta vez Ángela Merkel no participará.

Tras cuatro mandatos, para sumar 16 años en el poder Ángela Dorothea Merkel abandona el poder dejando a Europa, tal vez al mundo libre en la incertidumbre. Varios medios de comunicación señalan, que esto ha sido un logro, pues Merkel ha igualado la cifra récord de  su mentor Helmut Kohl. Destaca como uno de los grandes cancilleres de Alemana junto con Konrad Adenauer.

Curiosamente podemos decir que son las tres figuras más relevantes de la política alemana y mundial. Adenauer tuvo que capear el mundo de la postguerra, mientras que Kohl tuvo que lidiar con el mundo postguerra fría. ¿Y Merkel? Pues este mundo cargado de incertidumbre. Estas tres figuras tuvieron mandatos extensos, no por el uso de artimañas o el deseo de eternizarse en el poder, como ocurre con algunos políticos de la región, sino porque con eficiencia, supieron canalizar las demandas del pueblo alemán. Esto último es clave, porque se supone que es la esencia de la política.  

A Merkel se la adjudican muchos logros, por ejemplo el haber tenido la templanza suficiente para capear las crisis griegas, el Brexit y las crisis de los migrantes sirios, a los que, en una jugada audaz y muy atrevida, dejó entrar en el país. Pero,  el mayor logro de la infatigable canciller germana es su capacidad para medir los tiempos en política y comprender su entorno. Merkel comprendió las lógicas de comportamiento político al saber identificar a los aliados, enemigos, rivales y amigos, comportándose de forma diplomática y política con cada uno de ellos.

Templada, racional y comprometida, Merkel se sentó a negociar y hablar con las figuras más polémica del momento: Trump y Putin. Vale la pena reseñar, que Merkel siempre dio la impresión de ser la figura capaz de frenar al presidente ruso. Subestimada por muchos, tanto dentro como fuera de las fronteras, Ángela Merkel fue capaz de posicionarse en los diferentes escenarios políticos. Tanto, que podemos decir que era el ancla y la estabilidad de la UE.

Ahora, Merkel sale del escenario político, para ir al retiro como una ciudadana más. Esto genera incertidumbre, porque algunas figuras controvertidas siguen allí (Putin) y los líderes que quedan en Europa carecen de la fuerza y racionalidad. Macron ha demostrado ser de cartón piedra y Biden tampoco resulta ser lo suficientemente acertado. En un artículo escrito por Ana Alonso, para el portal en línea el Independiente, que se titula El fin de la era Merkel, se reseña un evento que pone en evidencia la relación entre ambas figuras

El único líder mundial de relevancia que estaba cuando fue elegida canciller y seguirá en el poder cuando se vaya es Vladimir Putin, con quien ha tenido una relación complicada.

En enero de 2007, Putin recibió a Merkel, que habla ruso, en su dacha de Sochi. A Merkel los perros le imponen respeto desde que le mordió uno en 1995.

Putin dice que quiso ser cariñoso con ella y dejó que pasara a la sala donde estaban reunidos su imponente labrador negro, Koni. Merkel estaba incómoda pero no se quejó ni expresó queja alguna. «Después de todo no come periodistas», comentó la canciller después con sorna. El presidente ruso se disculpó y aseguró que no sabía de su aversión por los canes. [i]

Aunque su decisión de no presentarse para un quinto mandato genera incertidumbres, lo cierto es que se trata algo digno de celebrar; pues demuestra talante político y democrático al hacerse a un lado, para que otros asuman su derecho y DEBER de dirigir la política alemana. Lo más interesante de esto, que por un lado también genera suspicacias y alegría, es que Merkel no eligió un sucesor claro. O, siendo más claro, no tuvo éxito a la hora de elegir y consolidar a quien la sucedería.

Con Ángela Merkel se acaba una forma diferente de hacer política. Una que es más cerca al verdadero concepto. Caracterizada por el deber, la racionalidad, por la capacidad de  análisis. Dinámica radicalmente opuesta a la que se ha puesto de moda con el populismo y radicalismo que ha caracterizado los últimos años y que algunas figuras han puesto de moda. La autora del mismo artículo, cita las memorias del Presidente Obama donde destacó esas características que caracterizan el estilo político de Merkel.

En su reciente libro de memorias, Una tierra prometida, Barack Obama se refiere en varias ocasiones a Angela Merkel. No habían empezado con buen pie porque Merkel había puesto objeciones a un discurso en la Puerta de Brandenburgo antes de las elecciones de 2008 por considerarlo electoralista.

«Era célebre su suspicacia ante los arrebatos emocionales o la retórica florida, y su equipo me confesó más tarde que había sido escéptica con respecto a mí precisamente por mis dotes oratorias. No me lo tomé como una ofensa, y pensé que para una líder alemana la aversión a una posible demagogia seguramente era algo muy sano», señala Barack Obama[ii].

Alonso vuelve a citar las memorias de Obama para señalar

A Obama le ocurrió con Merkel como a muchos otros dirigentes dentro y fuera de Alemania: poco a poco fue dándose cuenta de la verdadera dimensión de esta excepcional líder. «Cuanto más conocía a Ángela Merkel, más me gustaba; la encontraba sólida, honesta, intelectualmente rigurosa y amable por instinto. Pero también tenía un temperamento conservador por no mencionar que era una política con muchas tablas que conocía a sus electores», dice en sus memorias[iii].

Ahora, solo nos queda esperar a ver qué pasará en Alemania a finales de este mes. Pero, lo más importante ¿Cómo lo procesará la comunidad internacional? Sale de la escena una gran política, dejando una lección significativa y austera: la política tiene como finalidad servir al pueblo, escuchar sus problemas y darles respuestas. Y, cuando llegué el momento, hacerse a un lado para que haya alternancia. Lo demás es accesorio.  

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[i] Alonso Ana (03/01/2021) El fin de la era Merkel. El independiente. En línea https://www.elindependiente.com/internacional/2021/01/03/el-fin-de-la-era-merkel/ [Consultado: 18/09/2021]

[ii] Alonso Ana, El fin de la era Merkel, El independiente.

[iii] Alonso Ana, El fin de la era Merkel, El independiente.